* Se desarmó a todos los policías municipales.

* Se resguardaron en Palacio como activos, salieron como civiles.

Orizaba, Ver.- La Secretaría de Seguridad Pública del Estado asumió indefinidamente el control de la seguridad en esta ciudad. En una jornada que duró doce horas continuas, en la que se intervino, desarmó y suspendió a los casi 350 policías municipales.

El operativo de la SSP, con apoyo de la Fuerza Civil, Guardia Nacional y la Secretaría de la Defensa Nacional, generó incertidumbre entre la población por el movimiento y despliegue en la ciudad, de patrullaje por diversos sectores de la ciudad y el sobrevuelvo de un helicóptero, principalmente en la zona de la Comisaría de la Policía Municipal ubicada en Avenida Cri Crí, y el Palacio Municipal.

De acuerdo a información emitida por la citada Secretaría, hubo la detención de dos oficiales en activo por presuntos delitos contra la salud y ultrajes a la autoridad, por lo que quedaron a disposición de la Unidad Integral de Procuración de Justicia de la Fiscalía General del Estado.

La dependencia también determinó que se trató de una verificación del cumplimiento de la Licencia de Armas de Fuego por los elementos municipales, por lo que se pasó revista a los efectivos, y se asumió el mando de la Municipal.

El operativo

Alrededor de las 11:30 del día arribaron a la Comisaría de la Policía Municipal de Orizaba, al menos unas 30 unidades de la SSP, Fuerza Civil, Guardia Nacional y SEDENA, se intervino a los policías que estaban en ese momento dentro de las instalaciones, y se les desarmó.

En las calles de la ciudad fueron intervenidos algunos elementos más. Y al menos otros 58 que se enteraron de la situación, corrieron a resguardarse dentro de Palacio Municipal, donde cerraron las rejas de entrada y salida y permanecieron hasta pasadas las diez de la noche.

El Alcalde llegó la Comisaría, impidiéndosele el paso hasta momentos después en que fue autorizado por un mando de la Secretaría, para poder ingresar. A su salida rechazó dar declaraciones y se encaminó al Palacio Municipal. Mientras tanto, las patrullas municipales fueron sacadas y llevadas a resguardo al área de Servicios Municipales, conducidas por empleados del Ayuntamiento.

Reguardados en Palacio

En Palacio Municipal, los policías municipales mostraron su nerviosismo y preocupación por los acontecimientos. Y sus familiares, enterados de que estaban ahí, llegaron a proteger la entrada, impidiendo el paso de los elementos estatales y federales que permanecieron afuera, armados, a la espera.

Hubo varios momentos críticos, de intercambio de gritos y agresiones verbales entre los estatales y familiares de los policías. La sana distancia se rompió, no manera de cumplir, menos de recordar el porqué de los cubrebocas. Las pancartas salieron a relucir, abogando por los municipales. 

Poco después de las 3 de la tarde, el Alcalde bajó a la explanada donde estuvieron congregados todo el tiempo los municipales. Ellos y sus familiares, pidieron la presencia de los medios de comunicación como una forma de protegerse. Desde dentro, se hicieron coberturas en tiempo real. Las redes sociales tuvieron una gran actividad. Lo propios elementos desde dentro y sus familiares en el exterior, estuvieron difundiendo los hechos.

El acuerdo y desarme

Tras horas de diálogo, los policías lograron firmar un acuerdo para la entrega de armas y garantías a su persona, mismo que firmaron el Alcalde, el director de operaciones de Seguridad Pública, Alan Siprian Canseco; el jefe de Licencia Colectiva número 63, Javier René Fernández Rodríguez; el delegado regional de Derechos Humanos, Manuel Antonio Sánchez; y el segundo comandante, Carlos Alfonso Dorantes.

Entre otras cosas, se estableció que no haya hostigamiento de la SSP a policías municipales y sus familiares, y que sea el Ayuntamiento quien los traslade ida y vuelta a Xalapa para presentar los exámenes de control y confianza, y no sean requeridos quienes yo los tienen y están vigentes. Además pidieron la destitución del Director de Gobernación.

Tras la firma del acuerdo, los policías iniciaron la entrega de sus armas a elementos de la SEDENA, luego quitaron los uniformes y vistiendo de civiles, salieron de Palacio Municipal para reunirse con sus familiares que por horas los esperaron afuera.

La SSP indicó que los orizabeños tendrá su seguridad garantizada, ya que se mantendrán operativos preventivos aéreos y terrestres.

El alcalde Igor Rojí López, confirmó, primero a los medios y luego en una trasmisión desde su red social, que Orizaba ahora es vigilada por elementos de Seguridad Pública.